La semana pasada el Ministerio de Educación y el DEMRE de la Universidad de Chile publicaron los ensayos para la Prueba de Transición 2020, que es el nuevo instrumento de selección para la educación superior y que reemplazará transitoriamente a la PSU hasta que el 2022 se establezca el nuevo sistema definitivo.
Con la publicación de los ensayos, los jóvenes que quieren ingresar a la Educación Universitaria puedan ya comenzar a preparar su examen de admisión, sobre todo considerando que para ellos el contexto es doblemente incierto: las clases están suspendidas y la forma que tendrá el examen de admisión es -hasta ahora que se publican los ensayos- desconocida.
Los ensayos publicados son 7 modelos de las pruebas obligatorias de Comprensión Lectora y Matemática, así como de las pruebas electivas de Historia y Ciencias Sociales, Ciencias Biología, Ciencias Física, Ciencias Química y Ciencias para egresados de la Educación Media Técnico Profesional. Se publicó también un documento adjunto con las claves y respuestas de cada pregunta.
Mineduc y DEMRE anunciaron que en julio se entregarán las resoluciones de cada una de las evaluaciones. Según se informó en Mineduc, el material de ensayo fue elaborado por el mismo equipo que desarrolló la Prueba de Transición.
En el contexto de la emergencia sanitaria por COVID-19, los contenidos de 4° Medio que se incorporarán en la prueba, fueron también ajustados priorizando aquellos que son esenciales para que los colegios puedan enfocarse en ellos.
Por qué una nueva prueba
El fin de la PSU tuvo que ver con la decisión de disminuir las brechas educacionales y preparar de mejor forma a los estudiantes para la educación superior. Así, la Prueba de Selección Universitaria (PSU) desapareció para dar paso a una nueva prueba en 2022 que medirá competencias y tendrá menos preguntas. Mientras tanto, el instrumento de selección para ingresar a la Educación Superior el año 2021 –que será de transición- contará con modificaciones y ponderaciones que buscan favorecer a los estudiantes.
Los cambios fundamentales son:
- Menos ponderación de la prueba de selección: actualmente su ponderación suma un 50%, en el periodo 2020- 2021 será de un 30% y, de esa forma, tendrá mayor importancia a las notas de enseñanza media (NEM) y ranking.
- Menor número de preguntas: con el cambio de la prueba de selección, las preguntas se reducirán de 80 a 65; asimismo, se actualizarán los temarios y se apuntará a competencias fundamentales para el buen desempeño en la educación superior y no a conocimientos como la PSU.
- Medición de habilidades y competencias transversales: con el fin de medir competencias que son iguales para todos los estudiantes y que reduzcan las brechas educacionales y socioeconómicas, se realizarán test de escritura y habilidades transversales, para poder obtener información de sus habilidades.
- No habrá puntaje mínimo para postular a buenos estudiantes: las universidades aumentarán un 20% la admisión especial, para aquellos estudiantes que tengan un buen desempeño, comprobable en sus notas de enseñanza media y NEM.
- Las universidades definirán su sistema de acceso: las universidades estarán asesoradas por la Subsecretaría de Educación Superior, quienes serán los encargados a partir del 2021 del Sistema de Admisión.
Este cambio tiene su origen en la Ley de Educación Superior (Ley 21.091) promulgada en mayo de 2018 que hizo varias grandes modificaciones al sistema de Educación Superior, entre ellos, creó la Subsecretaría de Educación Superior, la Superintendencia de Educación Superior, un Nuevo sistema de Aseguramiento de la Calidad para las instituciones y carreras de educación superior, y estableció además un nuevo sistema de Admisión a la Educación Superior.
A partir de todas estas modificaciones de hace dos años, la Subsecretaría de Educación Superior del convocó a un Comité Técnico para el Acceso del Subsistema Universitario que comenzó a sesionar en mayo de 2019. Después de escuchó a expertos y representantes a distintas instituciones presentaron una propuesta para un nuevo sistema que introdujera cambios que venían siendo debatidos desde hacía ya varios años.
Este debate tenía que ver con poder contar con un sistema de acceso de mayor equidad, mayor flexibilidad, que diera cabida a la diversidad de la sociedad, en definitiva, más adecuado al siglo XXI, en la perspectiva de medir otras habilidades del estudiante indispensables para la educación superior, y no sólo la memorización de los contenidos del currículum. El buen rendimiento en la medición (PSU) de selección basada exclusivamente en contenidos del currículum no significaba necesariamente que ese alumno tendría un buen desempeño como estudiante universitario de una carrera, según evidenciaron diversos análisis.
Preparación en el Colegio
Los cambios en el sistema de admisión a la educación superior han tenido su eco inmediato en Colegio Mayor Tobalaba. Jasna Tomicic, Directora de Educación Media explica que las pruebas de transición “empezamos trabajándolas a principios de año, antes de la pandemia, revisando los temarios cuando se publicaron, asumiendo que se eliminaba más o menos un tercio de los contenidos anteriores, y asumiendo que al principio no había modelos claros de trabajo, aunque después fueron apareciendo”.
Llegada la pandemia y la suspensión de clases, dice Jasna Tomicic “Reaccionamos elaborando un plan con foco en un modelo de transición especial para la pandemia, que tiene como foco específico el trabajo de los temarios nuevos por parte de los profesores, la preparación de materiales, ´porque al principio de este cambio no había materiales de modelos de ejercicios. Ese proceso lo hicimos en el Colegio, y eso significó que el trabajo de los cuartos medios se centrara absolutamente en las pruebas de transición. Se hicieron encuestas con los alumnos, para dividirlos en científicos y humanistas y también un plan vocacional muy completo que elaboró el Colegio, para que pudieran focalizarse”.