El año 2020 hicimos un largo y complejo recorrido como Comunidad Colegio Mayor: pasamos por el temor y el estupor inicial; nos sacudimos para resolver como colegio y con las familias “¿cómo sorteamos de la mejor forma esta crisis?”. Encontramos soluciones técnicas, pedagógicas, sanitarias, de contención emocional, todo, para continuar con el proceso educativo pese a la pandemia. Y culminamos el año con un retorno presencial a clases seguro y entusiasta. Quisimos recordar cómo fue este camino a través de las voces de sus protagonistas: docentes, apoderados, personal de salud, del área técnica, estudiantes.
Fue un comienzo de año “casi” como cualquier otro, con compras de uniforme y preparación de mochilas y rutinas. “Casi”, de no ser porque la primera semana de marzo ya habíamos visto en las noticias que en Asia y Europa tomaban severas medidas de cuarentena debido a un nuevo virus de origen chino, decían, que estaba dejando gran cantidad de víctimas, era altamente contagioso y para el que no había cura. En el lapso de 10 días el virus había llegado a un colegio de Vitacura, empezó a expandirse por el barrio alto y… en cuestión de horas se nos dio vuelta el mundo tal vez para siempre: el coronavirus se asentó en el país, las autoridades decretaron confinamientos comunales y luego en todo el país, y se cerraron colegios, comercios, oficinas, industrias y parques. Todo lo que ordenaba nuestro mundo como normalmente lo habíamos conocido.
P: ¿Cómo imaginaron el año escolar en marzo cuando se hablaba de los primeros casos de Covid detectados en el barrio alto?
-“Pensamos que demoraría en hacerse masiva la infección, que estaría contenida en ese sector de la ciudad, solamente. Creía que si pasábamos a alguna medida excepcional no sería más que por un par de meses y luego podríamos seguir con casi total normalidad”. Jorge Lagos, Profesor de Educación Física y profesor Jefe de III° Medio
–“No dimensioné que serían tantos meses. En casa imaginamos 2 o 3 meses, jamás el año entero. Lo más complicado fue lo económico, saber fehacientemente que se venía una crisis aparejada que sería muy difícil para las familias. Juan Flores, apoderado y ex integrante del centro de padres.
– “Sentía mucha expectación por lo que estaba sucediendo a nivel mundial y cómo el avance del virus provocaba el cierre de colegios y entidades educacionales por todo el mundo, pero sin sospechar los alcances y consecuencias que íbamos a vivir nosotros durante el año”. Macarena Salas, Rectora Colegio Mayor Tobalaba.
Sorteando desafíos
Tener que pasar al teletrabajo, conectados todo el día o, derechamente, perder la fuente laboral. Al mismo tiempo, cuidar uno o más niños que no tenían clases y estaban todo el día en casa; organizarse con las escasas horas de permiso autorizado para salir a hacer compras mínimas. Los primeros dos meses de la pandemia plantearon muchos y agotadores obstáculos. Pero también empezaron a vislumbrarse nuevas formas de hacer las cosas para sobrellevar la situación inédita
El Colegio Mayor implementó una primera fase de clases virtuales a través de las plataformas Meet y Zoom y, después de unas semanas de evaluación pedagógica y de retroalimentación con los apoderados y estudiantes, a fines de mayo amplió y organizó un calendario de clases que se apegara lo mejor posible a la malla curricular y al proyecto educativo del Colegio.
P: Cuál dirían que fue el reto o el obstáculo más desafiante del año: ¿adecuarse a un nuevo sistema de clases online? ¿convencerse de la validez y seriedad del nuevo sistema? ¿enganchar a los estudiantes en la nueva modalidad? ¿Organizarse y planificarse?
– “El desafío que tuvimos como institución fue adecuar el currículum y equilibrar la planificación curricular en una medida adecuada tanto para los docentes como para los estudiantes. Los horarios, asignaturas y talleres fueron asentándose con el paso del tiempo y logrando entregar los conocimientos pertinentes a nuestros estudiantes. De esta manera el colegio pudo sortear las dificultades, cumplir más allá de los exigido ministerialmente y asentar bases sólidas para aprendizaje en línea”. Macarena Salas, Rectora Colegio Mayor Tobalaba.
“Fueron dos las dificultades más grandes: primero, transformar las planificaciones que como docentes habíamos hecho para clases presenciales. Pasar de una planificación amplia basada en la interacción y la continuidad normal de lo presencial hacia lo remoto fue difícil, había que visualizar cómo hacerlo y también calcular los tiempos que teníamos por sesión. Lo segundo fue encantar a los alumnos y alumnas, lograr que pudieran entender que las clases serían efectivas en la medida que ellos también las tomaran en serio”, Jorge Lagos, docente de Educación Física y profesor Jefe de III° Medio.
-“Sin duda fue la motivación para poder asistir a las clases, habían algunos días que ya no quería entrar a las clases online pero tenía que lograr motivarme a mí misma y todo el día sentada con el computador cansaba un poco”. Constanza Vásquez, alumna IV Medio.
Adoptada la decisión de continuar con proceso educativo adaptándolo a las herramientas disponibles vino el desafío técnico: cómo hacer este “traslado” de lo presencial al online con un alto estándar de calidad. El Director del Área Técnica, Sergio Uribe, lo explica: “Teníamos un bagage e historia de clases con contenido telemático a partir de la implementación de Flipped Classroom, hace unos años. Aunque eso ayudó, pasar a clases virtuales era un reto. Pero lo más difícil e importante fue que las personas, apoderados y estudiantes se habituaran a usar las plataformas disponibles, plataformas que además también eran recientes (Zoom, Meet) y que presentaban intermitencias y fallas porque las redes de internet en Chile no daban ni dan aún abasto para el actual nivel de demanda. A veces se caen, falla la continuidad de una clase, falla la conexión desde las casas. Hubo que acostumbrarse a convivir con eso en esta nueva manera de vivir la educación”. Sergio Uribe, Director del Área Técnica de Colegios Mayor.
-“Para mí, el mayor obstáculo fue cultivar la empatía en todos los sectores de nuestra Comunidad Mayor, ponerse en el lugar del otro. Empatía entre los apoderados, por el tema económico y las soluciones posibles; empatía hacia las dificultades que tuvieron otras familias o los mismos docentes cuando se hizo el traslado a educación 100% online. Después, empatía con el proceso de retorno: hasta hoy hay padres que solo critican la propuesta educativa, otros critican y no respetan las reglas y protocolos de cuidados para el retorno. La pandemia sería más llevadera si se empatiza desde el lugar donde uno está con lo que le está sucediendo a los otros. Juan Flores, apoderado y ex integrante del centro de padres.
– “El obstáculo más desafiante fue sentir la confianza en este nuevo sistema online. Confiar en que pese a todo el colegio lograría entregar una educación de calidad”, Victoria Silva, apoderada Colegio Mayor.
Costos Emocionales
La suma de obstáculos y retos, la incertidumbre de un confinamiento que se alargaba en el invierno, las nuevas condiciones de vida familiar y laboral pasaron su factura a nivel emocional. Ha sido una exigencia no menor en muchas áreas.
– “Al principio fue muy complicado. Entre planificar las clases, crear los contenidos multimedia, ppt y herramientas necesarias y exigirme hacer una clase atractiva. Aprender a usar las distintas plataformas de videoconferencia también fue complejo. Todo fue tan repentino que fue abrumador, el descanso entre todo era poco y malo. De a poco fui tomando el ritmo y mejoró, pero fue difícil”. Jorge Lagos, Profesor de Educación Física y profesor Jefe de III° Medio.
-“La parte emocional si se vio muy afectada a nivel general por el encierro y estar en un punto monótono donde solo se quedaba soportar las cosas y no había mucho más que hacer”. José Lema, alumno IV Medio
– “Hubo meses de alto costo emocional para todos, ya que el encierro genera ansiedad, angustia y depresión. Por eso han sido tan importantes los espacios que el Colegio generó para atender y tratar los aspectos sicológicos a lo largo de todos estos meses”. Texia Verdugo, enfermera universitaria del Colegio Mayor,
– “Para mí, fue difícil la adaptación constante. Se nos movió el piso, hubo que adaptarse al nuevo escenario, y entonces el escenario cambiaba otra vez. Es difícil vivir sin saber cómo viene el mañana. Juan Flores, apoderado y ex integrante del centro de padres.
-“El balance emocional, al final, es positivo: ganamos estar en familia. Mi esposo está en casa con teletrabajo desde marzo y antes de la pandemia casi no nos veíamos en la semana. Cada uno puso mucho de su parte para lograr armonía. También tuvimos apoyo sicológico del Colegio y apoyo emocional de nuestra profesora jefe. Así siempre se mantuvo una rutina diaria en casa, casi como ir al colegio en forma presencial”. Victoria Silva, apoderada Colegio Mayor.
Un retorno seguro
En pleno invierno, pese a que no había señales externas de la posibilidad de retomar pronto la normalidad, el Colegio puso la mirada en el desafío más importante que se vendría en algún momento: la reapertura de actividades y asegurar a funcionarios, apoderados y estudiantes que cuando eso sucediera, sería un retorno con seguridad sanitaria. Se contrató a especialistas médicos y en seguridad y prevención de riesgos para planificar con anticipación. A partir de esa decisión se creó un Comité Corporativo de Retorno para los Colegios Mayor, con un Comité Ejecutivo para Colegio Mayor Tobalaba, y se creó además una Dirección de Salud para los Colegios Mayor. “Esa noticia fue la primera esperanza de que algún día, antes o después, íbamos a volver al colegio, a vernos”, dice Constanza Vásquez, alumna de enseñanza media.
Quien encabeza la Dirección de Salud, el pediatra y especialista en infecciones infantiles, doctor Jorge Vergara nos cuenta: “Cuando se inició este proceso estábamos todos preocupados y nerviosos de que todo resultara bien hecho. Creo que todo el trabajo preparado por el Colegio Mayor se fue desplegando bien pero, además, se ha ido perfeccionando. Se mejoraron los protocolos sanitarios una vez contrastados con la realidad. También ha sido muy bueno y crucial el trabajo de las enfermeras, por la acuosidad con que han supervisado y vigilado todo dentro del Colegio antes y ahora con las clases presenciales”.
-“En la primera etapa había mucho susto, incluso corrimos demás debido al exceso de precauciones. Con el tiempo aprendimos que no había que correr tanto, había que esperar a ver cómo evolucionaba esta pandemia de acuerdo a los quehaceres de las personas, también variamos dentro del Colegio el sistema de alertas internos y la decisión de toma de exámenes. Ahora vienen las vacunas, otros medicamentos están avanzado, en dos meses esto puede cambiar muchas cosas. podemos esperar el retorno de clases de marzo con un poco de esperanza”. Doctor Jorge Vergara, Dirección de Salud Colegios Mayor.
-“El reto más desafiante de preparar un retorno fue generar hábitos en la comunidad sobre el uso de elementos de protección personal y conductas responsables. A pesar de que las personas no estaban acostumbradas a este tipo de supervisión constante, finalmente se ha visto cooperación para seguir las indicaciones con el fin de cuidarnos y prevenir”. Texia Verdugo, enfermera universitaria del Colegio Mayor Tobalaba.
Concuerda con esto Patricio Astete, prevencionista de Riesgos del Comité Corporativo de Retorno: “Transmitirle a los padres y apoderados, a los docentes, la sensación de una cierta “normalidad, pero con seguridad sanitaria para cuando volvieran a su lugar de trabajo y luego a clases fue el reto más grande. Trabajamos más fuerte fue en la capacitación de los funcionarios: no es fácil hacer tomar conciencia del costo de un descuido”.
-“Fue muy importante la creación de una Dirección de Salud porque organizó la información en un solo canal de comunicación. También contar con protocolos sanitarios, que se dieran a conocer con tiempo, hizo que, por lo menos en mi caso, bajara un poco la incertidumbre de qué hacer si es que volvíamos”. Jorge Lagos, Profesor de Educación Física y profesor Jefe de 3° Medio.
-“Para mí, fue crucial (la Dirección de Salud): Me entregó seguridad y confianza de que el Colegio quería hacer las cosas bien y que el regreso sería seguro. También participé de las charlas que se hicieron con el pediatra, y otros temas contingentes que entregaban claridad de la situación”. Victoria Silva, apoderada Colegio Mayor.
– “No sé si en general los apoderados se han dado cuenta del enorme esfuerzo y del lujo con que contamos con tener equipos profesionales de ese nivel para abordar el tema sanitario. Por razones familiares tengo acceso a realidades de otros colegios, de mayor y de menor estándar, y no existen equipos de salud como el que implementó Colegio Mayor. Ni se le ha tomado el peso a la tranquilidad que eso da”. Juan Flores, apoderado y ex integrante del centro de padres.
-“Que haya un médico y una enfermera especialistas en epidemiologia, que haya enfermas estables dentro del Colegio Mayor, un prevencionista de planta y las TENS, es contar con un equipo inusual y de lujo para cualquier institución, ya no hablemos solo de colegios. Siento que estamos liderando en materia de protección y medidas sanitarias para una comunidad escolar”. Patricio Astete, prevencionista de Riesgos del Comité Corporativo de Retorno
Educación y tecnología: unidos para siempre
Sergio Uribe, Director del Área Técnica, cree que con todo lo experimentado por Colegio Mayor y muchos otros establecimientos, la educación chilena “se pegó un salto de 10 años. Cientos de miles de estudiantes chilenos han conocido un modelo distinto al modelo de clase unidireccional que se mantuvo por décadas”. También lo creen los docentes y apoderados.
-“Definitivamente, la educación cambió y el uso de las tecnologías, más las clases en línea, vinieron para quedarse y para ser un elemento facilitador para adquirir nuevos conocimientos. Sin duda, los estudiantes han logrado un avance en el manejo e innovación en sus aprendizajes”. Macarena Salas, Rectora Colegio Mayor Tobalaba.
-“Hay un cambio claramente, y tiene que ver con que tanto docentes, institución, estudiantes y apoderados debemos estar preparados para tener la flexibilidad suficiente en las formas de entregar y recibir el proceso educativo”. Jorge Lagos, Profesor de Educación Física y profesor Jefe de III° Medio.
–“Esta cuarentena sirvió para mejorar la educación, modernizarla, los niños crecieron en autosuficiencia y en responsabilidad y en autorregulación. Ha sido una ganancia para los niños y las familias”. Juan Flores, apoderado y ex integrante del centro de padres.
–“Creo que el nuevo sistema nos dio más facilidad en tema de notas y además, me permitió estar más tiempo con mi familia y aprendí valorar muchas cosas”. Constanza Vásquez, alumna IV Medio
En todo caso, estos cambios en la educación significarán nuevas adaptaciones.
-“Llegado el momento del retorno a clases presenciales, el desafío fue implementar las clases híbridas. Hoy, la gente admite que en su conexión de casa hay fallas técnicas pero no espera lo mismo para el servicio del Colegio u otros servicios importantes. Sin embargo, e requiere también comprensión y acostumbramiento”. Sergio Uribe, Director del Área Técnica.
–“Tendremos que adaptarnos a que claramente nuestra vida cambió a nivel general para siempre, y por lo mismo el ámbito de la educación se tendrá que modificar ahora y en adelante, constantemente, de acuerdo a cómo evolucione este fenómeno”. Texia Verdugo, enfermera universitaria del Colegio Mayor Tobalaba.
-“Al menos temporalmente, la educación sufrió cambios, cambios que a mi parecer son malos en cuanto a lo social: esto que debería ser un distanciamiento físico, pero se ha vuelto un distanciamiento social que encuentro peligroso”. José Lema, alumno IV° Medio.
Costos vs Ganancias
Pensando en este 2021, Sergio Uribe, Director del Área Técnica cree que “es posible dentro del modelo de clase híbrida avanzar en mayores grados de interacción y participación entre los alumnos presenciales y los que siguen la clase desde casa. Y si es por soñar con las posibilidades que ofrece la tecnología, me encantaría si pudiéramos implementar el uso pedagógico de la realidad virtual y de la realidad aumentada”.
-“El proceso de retorno y la consolidación de las VCO fueron sin duda un gran éxito para la Comunidad Mayor. Aquí está concentrado el trabajo en equipo y la resiliencia de todo un grupo de profesionales, los estudiantes y familias. Así también, colocar en práctica las habilidades en nuestros estudiantes que son parte de nuestro PI, autonomía, colaboración, comunicación entre otras”. Macarena Salas, Rectora Colegio Mayor Tobalaba.
-“La mayor ganancia de todo el proceso fue darnos cuenta de que a pesar de todas las dificultades que se puedan presentar, como profesores fuimos y seremos capaces de llevar adelante nuestra tarea adaptándonos a las herramientas disponibles”. Jorge Lagos, Profesor de Educación Física y profesor Jefe de III° Medio.
–“La mayor ganancia fue la unión familiar. Mi hija es más independiente, autónoma, aprendió una nueva manera de comunicarse, se adaptó increíblemente rápido a la metodología y vivió in situ el retorno seguro al colegio. Fue ganar, ganar y ganar…”. Victoria Silva, apoderada Colegio Mayor
-“Manejamos un proceso de retorno presencial y no hubo ni unbrote infeccioso en el colegio, eso es un éxito. El primer semestre 2021 será parecido. Tengo expectativas con que ojalá logremos avanzar en internalizar cada uno las medidas de protección y cuidado cotidiano y ser responsables, de modo que nos permitan vivir con una cierta “normalidad” pese al coronavirus y bajar los niveles de angustia de salir, de estar en grupo”. Texia Verdugo, enfermera universitaria del Colegio Mayor Tobalaba.
-“Lo más importante de que haya salido bien el retorno el 2020 es que tenemos una base estructural lista para marzo del 2021. Hay cosas que mejorar, pero partimos de una realidad que ya mostró ser exitosa, que solo tiene cosas que se pueden hacer mejor, pero que funciona”. Patricio Astete, prevencionista de Riesgos del Comité Corporativo de Retorno
– “A pesar de todos los problemas que se puedan presentar en el 2021, recomendaría no quedarse en la frustración, que solo hace que todo sea peor. Hay que conocer los propios límites y parar cuando se llegue a éste, no sobreexigirse. Eso no significa no esforzarse, porque es lo más importante que deben hacer para que sus metas, motivaciones y los propios estudiantes mismos no decaigan por completo”. José Lema, alumno IV Medio.
Quién mejor resume las ganancias y expectativas para este 2021 es la Rectora Macarena Salas: “Esperamos que sea un año que nos permita consolidar un modelo educativo que tiene la flexibilidad de ir adaptándose al contexto sanitario. La integración de las tecnologías será una herramienta clave para desarrollar las metodologías que trabajamos como Colegio y que nos ponen a la vanguardia para estos nuevos tiempos”.