“El regreso a clases debe garantizar seguridad de los niños y tranquilidad de sus familias”, Unicef.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, UNICEF, manifestó que el regreso a clases presenciales de los niños, niñas y adolescentes debe realizarse cuando las condiciones sanitarias permitan garantizar su seguridad en materia de salud.
Bajo esta premisa, cada país, y cada comunidad educativa que ha dejado el confinamiento comenzó un gradual retorno al aula. Esto ha implicado que las autoridades adoptaran protocolos sanitarios orientados a controlar y reducir los riesgos de contagio, pero que al mismo tiempo fuesen confiables y proporcionaran tranquilidad a las familias de los estudiantes.
Los países de la Unión Europea que ya han relajado las medidas de confinamiento estricto en casa y paulatinamente retomaron las clases presenciales han informado a través de sus autoridades que no se ha detectado un incremento significativo de casos. Esto debido a las altas medidas de control e higiene de los estudiantes. Sin embargo, a pocas semanas o a días del retorno, todavía es muy pronto para sacar conclusiones definitivas.
Las normas para el retorno al aula pasan por organizar grupos reducidos, de unos 15 estudiantes, poner espacio entre ellos dentro de las aulas y extremar las medidas de seguridad y limpieza continua dentro de los colegios. Estos planes han sido elaborados por las autoridades sanitarias y los expertos epidemiológicos.
No obstante, la situación del continente es muy variada: países más afectados por el virus Covid-19, como España e Italia, en realidad ya han concluido las clases por vacaciones de verano y retomarán en septiembre. Alemania y Francia retomaron durante el mes de mayo, pero hubo que volver a cerrar algunos establecimientos debido a brotes. En Alemania, los distintos territorios determinaron de acuerdo a su realidad local si estaban o no en condiciones de retornar, y algunos lo hicieron, mientras que otros cerraron el año escolar hasta septiembre. En Dinamarca regresaron a clases al igual que los territorios asiáticos.
En las diferentes redes y medios de comunicación hemos visto como estudiantes de diferentes niveles educativos han transformado sus rutinas, desde la salida de sus hogares, el transporte y el ingreso al colegio en un ritual de higiene y seguridad con la comunidad escolar.
Medir la temperatura al salir de casa, luego antes de ingresar a clases, aplicación de gel antibacterial en manos, mantener el distanciamiento físico, son algunas de las medidas que cada nación ha tenido que tomar para evitar el aumento o rebrote de contagios de coronavirus.
Algunos han ido más allá, integrando barreras de plástico, uso obligatorio de viseras plásticas para alumnos y profesores, recolección de muestras para detectar presencia del virus o alas en el nivel primario para mantener el distanciamiento entre compañeros.
¿Cómo nos estamos preparando?
En esta situación inédita para la educación, en Colegios Mayor no solo hemos fortalecido y mejorado los métodos de educación a distancia, sino que también hemos constituido un Comité Corporativo de Retorno al Aula, además de un comité de gestión en cada uno de los establecimientos, que propondrán y ejecutarán protocolos sanitarios desde ya y en previsión del momento en que llegue el retorno a las salas. Con objetivos y funciones definidas para diseñar, implementar y hacer operativas las políticas definidas por el Comité Corporativo, el equipo de este comité es presidido por el doctor y ex ministro, Martín Zilic.
Sin duda, ha sido un escenario nuevo e intimidante, pero hemos aprendido y entregado el mayor de los esfuerzos, tecnológicos y humanos para asegurar a nuestra comunidad escolar una continuidad de aprendizaje y una contención emocional que fortalezca afectos y vinculación entre la Comunidad Colegio Mayor Tobalaba y todos quienes somos parte de ella.